El presidente de Brasil, ya nos tiene acostumbrados a «incendiar» todo lo que toca, con sus polémicas declaraciones, trato a los medios y con su aptitud «chulesca», de matón de barrio.
Una de esas caricaturas políticas que se hacen muy fáciles de hacer, porque el personaje da mucho juego. Es que en las caricaturas pasa lo mismo que con los comics. Los de mayor éxito, no son presisamente por tener a un superheroe muy bueno. Triunfan por tener un malo muy malo. Es decir: Cuanto más malo sea el malo, mayor interés despertará el comic.
Con los personajes políticos sucede otro tanto. Cuantas más barbaridades diga o haga el político de turno, mejor pueden ser las caricaturas que se saquen de ellos.
En este caso, por sus declaraciones. Su negacionismo de la pandemia, su maltrato a la prensa, su homofobia y racismo…En fin, que no le falta absolutamente de nada.
Esta caricatura fue hecha, con motivo de los incendios que devastaron el Amazonas en 2019, pero aún hoy, mantiene lamentablemente, toda su vigencia.
